Cuidar tu micropigmentación es fundamental para mantenerla en buen estado y prolongar su duración. Aquí te dejo 10 pasos simples que puedes seguir:
- Después del procedimiento, evita tocar o frotar el área tratada para evitar infecciones.
- Lava suavemente el área con un jabón suave y agua tibia. No uses productos agresivos o abrasivos.
- Aplica una crema cicatrizante o un ungüento recomendado por tu especialista. Esto ayudará a hidratar y proteger la piel.
- Evita exponerte al sol directamente, especialmente durante las primeras semanas después del procedimiento. Siempre usa protector solar con alto factor de protección.
- Evita nadar o sumergirte en piscinas, jacuzzis o cualquier cuerpo de agua durante al menos dos semanas. El agua clorada puede afectar la micropigmentación.
- No rasques ni arranques las costras que se formen en el área tratada. Esto puede provocar pérdida de pigmento o cicatrices.
- Evita el uso de maquillaje en el área tratada hasta que esté completamente curada.
- Evita el uso de exfoliantes o productos que contengan ácido en el área tratada, ya que pueden afectar la pigmentación.
- Evita el contacto excesivo con productos químicos, como cloro, productos de limpieza o productos para el cabello, ya que pueden desvanecer el pigmento.
- Mantén una buena higiene facial y evita el contacto con la suciedad y el aceite para evitar infecciones.
Recuerda siempre seguir las recomendaciones de tu especialista y programar citas regulares de seguimiento para mantener la micropigmentación en óptimas condiciones.